En la bancada morenista de Diputados se aceleró este miércoles el rumor de que Alfonso Ramírez Cuellar, legislador de línea directa a Palacio Nacional, podría reemplazar a Julio Berdegué en la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural.
El movimiento sería acorde a la narrativa y trayectoria del legislador. Cercano a Claudia Sheinbaum, lo cierto es que su situación actual en San Lázaro no es del todo favorable: sus iniciativas generalmente no van más allá del plano declarativo, no coordina la bancada ni maneja presupuesto y los obradoristas duros lo ven, en sus pláticas privadas, demasiado crítico con el sexenio anterior.
Para Ramírez Cuellar además sería entrar a un escenario crucial: las protestas del sector agropecuario en todo el país se han vuelto un foco de tensión para el oficialismo y Berdegué no ha demostrado la capacidad política que le permita resolver los conflictos de fondo que involucran a productores, intermediarios y Gobierno.
Para el diputado federal sería ganar una centralidad que actualmente se le diluye entre el cálculo constante de Ricardo Monreal y el vicecoordinador Pedro Haces, que ofrece cenas y saraos cada vez más fastuosos, aunque, desde el pasado verano, cada vez más reservados.
Y es que Ramírez Cuellar puede ser un amigo fiel, pero Haces conoce historias urticantes del municipio de Tlalpan. Una diferencia que explica cuestiones concretas de la cotidianidad en la bancada.
La cuestión todavía está abierta, en parte porque también se estaría considerando al diputado federal Leonel Godoy como otro posible reemplazo de Berdegué.
Godoy ha defendido al Gobierno y a su plan de seguridad frente a la crisis desatada en Michoacán y además forma parte del obradorismo duro que sigue de cerca los ajustes en el gabinete que podrían conocerse antes de que termine el año.
De hecho, un cálculo que también se escucha en San Lázaro es que Godoy podría ser un premio de compensación a Palenque a cambio del despido de Octavio Romero en el Infonavit.
