La deuda se duplica en siete años y el IMEF advierte sobre el riesgo de perder el grado de inversión

La deuda se duplica en siete años y el IMEF advierte sobre el riesgo de perder el grado de inversión

El desajuste entre el crecimiento de la deuda y el del PIB preocupa al IMEF, el instituto que representa la voz técnica del sector privado.

En la conferencia mensual que brinda el instituto, el presidente del Comité Nacional de Estudios Económicos Víctor Manuel Herrera Espinosa, explicó que el problema central es la diferencia de velocidades: mientras que el déficit fiscal crece a un ritmo de 4% anual, cuando lo recomendable según estándares mundiales sería de menos del 3%, el PIB avanza a menos del 1%.

“Esto significa que estamos gastando más de lo que deberíamos, y creciendo menos de lo que deberíamos crecer”, aseguró Herrera Espinosa y agregó que “la renegociación del T-MEC como factor externo, y la reforma judicial y la desaparición de organismos reguladores autónomos en la parte interna inhiben la inversión, y eso hace que el PIB, el numerador del indicador, esté creciendo más lento”.

IMEF: “Las reformas constitucionales frenan la inversión”

Los datos del informe del IMEF muestran la magnitud del desafío. En diciembre de 2018 la deuda del sector público federal era de 560,000 millones de dólares. Para septiembre de este año llegó a 1 billón 67 mil millones de dólares, prácticamente el doble en siete años. “Traducido a personas, hoy cada mexicano tendría que aportar 8,022 dólares para cubrirla, frente a los 4,480 dólares de 2018”, asegura el documento.

Con esta dinámica, la propia SHCP estima que la deuda bruta llegará a 57% del PIB este año, “un nivel similar al que Sudáfrica tenía en 2021 cuando perdió el grado de inversión, y un poco menor al 60% de Brasil en 2015 cuando su deuda fue degradada a nivel especulativo”, alerta el instituto.

“Aun cuando el déficit fiscal de ambas naciones era de doble dígito en esos momentos, mucho mayor que el de México, la falta de crecimiento nos llevará eventualmente a un nivel insostenible de deuda para un país calificado en grado de inversión como lo es México hoy día. La pérdida del grado de inversión ocasionaría, entre otros efectos, una depreciación importante del peso como ocurrió con el real en Brasil y el rand de Sudáfrica cuando fueron degradados de nivel”, sentencia el documento.

La falta de crecimiento nos llevará eventualmente a un nivel insostenible de deuda para un país calificado en grado de inversión como lo es México hoy día 

El Fondo Monetario Internacional comparte esta preocupación. En la Consulta del Artículo IV proyecta que, sin ajustes, la deuda podría llegar a 62% del PIB en 2030. Su recomendación es bajar el déficit amplio a 2.5% del PIB, para evitar que el apalancamiento siga aumentando.

El organismo también renovó la línea de crédito flexible para México, pero lo hizo por un monto menor al que tenía antes, es decir, redujo su tamaño. Según Herrera Espinosa, esta línea funciona como un seguro: tiene un costo mientras no se utiliza, pero ofrece respaldo al peso en caso de una emergencia.

Autor